2º dìa. Pantallazos de la ciudad.

Hoy me levantè relativamente tarde, tipo 10, venìa cansado por los vuelos los nervios. Habia pensado aprovechar levantandome temprano para armarme en mi cuadernitouna guia rapida para hablar frances, programarme mi dia turistico y salir a recorrer hsta volver al dpto a la hora del almuerzo. El sueño me pudo mas y termine suspendiendo mis dos primeras actividades.
Al fin levantado, me pegue un duchazo express, desayune unas ricas tostadas con una mermelada de no se y me prepare para salir. Como no tenia tiempo de programar mucho, decidi salir por los alrededores de casa. Por suerte, como conte, queda en el medio de todo o casi todo. Cambie mi look de campera de cuero por un sobretodo negro mas a tono con los parisinos y los borcegos por unas comodas zapatillas y parti a mi primer destino turistico oficial en Paris: El jardin de les tuilleries.

Les Tulleries

Una de las primeras cosas al salir que note y que supongo que es caracteristico del invierno parisino, fue el dia nublado. Las nubes cubrian todo el cielo, sin dejarle tregua al sol, y asi se mantuvo todo el dia.

Camine dos cuadras, en el corto recorrido, pase por muchos cafes, de variado estilo, y casi el total de la gente, de todas las edades, vestida formal. Entre a las tulleries por le Carrusel, creo. Apenas entre vi el patio interno del Louvre con la piramide de vidrio en el medio. El tamaño del louvre es impresionante, es gigante. Ahora entiendo como entran 400 mil obras de arte adentro. Se empezo a construir en el siglo XII, como un castillo. Fue con los luises el palacio real. Creo que la arquitectura, es en su mayoria de esa epoca. Fue abierto como museo a todo el publico, obviamente con los jacobinos en el poder en la revolucion francesa, en el año 1793. No vi tantos turistas como imaginaba; me imaginaba el patio lleno de orientales con sus camaras, habia si, pero no tantos.

Despues camine por el jardin de les tuilleries hasta la plaza de la concorde. El jardin es muy lindo, ocupa mas o menos seis cuadras, muy cuidado, lleno de arboles y esculturas en el medio. Tambien tiene unas fuentes muy a tono. En el medio de la plaza de la concorde hay un obelisco, regalo del virrey egipcio a Francia en el siglo XIX; en una parte de la plaza muestran la odisea que fue llevar el obelisco de Egipto hasta Paris. Tambien en la plaza de la concorde empiezan los champs elysees que se extienden hasta el arco del triunfo.

Cuando llegue a la concorde, no tenia mucho mas tiempo para recorrer, asi que empece la vuelta pero subiendo por la rue royale hasta la iglesia de la Madeleine. Por la rue royale y st honore, a dos cuadras de donde estoy viviendo, vi los locales de las marcas mas caras, o chetas como quieran llamarlas. Dolce Gabban, Cartier, etc. De hecho cuando llegue a la Madeleine, me pare en la vereda a ver el mapa y veia que la gente miraba cerca mio y no entendia porque. Cuando baje mapa entendi, me habia parado al lado de una terrible ferrari. La Madeleina da la impresion, con mi poco conocimiento de arquitectura, de ser una iglesia de estilo neoromanico con neoclasico, semejante para los que la conocen, a la iglesia del colegio. Por adentro, me daba la impresion que mas alla de los turistas no haya nadie rezando. Tiene un trabajos en madera zarpado y hay, pero no lo vi, una pintura de Napoleon. Adentro habia visto unas chicas con el perfil de chetas argentinas, cuando sali habia una sentada en la puerta. Tenia un buzo que decia st andrews buenos aires. Me acerque a hablarle, quiza con doble intencion, pero no mostro mucho entusiasmo de encontrar otro argentino (cosa que se dio cuenta tarde, despues de un rato de estar hablando en porteño, me pregunto ¿no sos de aca(por paris)?. Segui mi camino.

Segui por el Boulevar des capucines hasta la Opera Garnier, la vi por afuera, y volvi la avenue de l`Opera hasta casa. Definitivamente la gelnte se viste muy parecida, otro cosa que me llamo la atencion fue que hay muy poca gente joven, en promedio de edad son todos mas vi ejos. Pocas chicas, lamentablemente. Un dato que me olvide de aportar fue que desde el jardin de les tuilleries se puede ver monumentalmente a la torre Eiffel.

Del Trocadero a la Republique

Almorce con mi vieja, unos quesos por supuesto, y me pidio que la acompañe cerca del trocadero en el Barrio 16. Tomamos para llegar el metro con sus 10 mil combinaciones. Bajamos sobre la avenue Kleber que va del Trocadero al Arco del Triunfo. No es la parte mas turistica de la ciudad y lo notamos en que empezamos a ver gente pidiendo monedas en la calle o con carteles de "tengo hambre", esperaba verlo en Buenos Aires, no en Paris. Le pregunte a mi vieja, que habia venido hace 30 años, y conto que antes no habia indigentes en Francia. La deje donde tenia que ir y parti al Trocadero.

El Trocadero es una serie de museos pegados de los años 60, desde su plaza sobre el sena, se tiene una de las mejores vistas de la torre Eiffel; es realmente gigantesco. Ahi si pude ver muchos turistas y muchos negros vendiendo baratijas de la torre. Antes de entrar a los museos, fui a l cementerio de Passy, que se encuentra al frente. Es bastante pequeño, sin embargo es lindo y tiene su encanto. Curioso que cuando entre, un dia nublado, frio y sin mucha gente, empezo un cuervo a graznar, toda una imagen. Otra detalle del cementerio, son las ventanas de los edificios dando directamente de lleno contra el cementerio, aun peor que en Recoleta.

Sali del cementerio y encare hacia el Trocadero. El primer museo al que llegue fue al museo de la Marine, saque chapa de periodista, con carnet y todo, y logre pasar gratis; alquile el audioguia, por lo menos. El musee de la marinee es un muy lindo museo, aunque no muy largo para recorrer. Con dos horas alcanza. Se destaca los modelos a escala de las galeras antiguas y las popas que todavia se mantienen. Lo recomiendo, sobretodo la parte de venta al publico, que tiene cosas interesantes. No tenia mucho tiempo, tenia que estar a las 5 cerca av. Kleber y Galilee. Tome el camino mas corto y me cruze con el museo de arte del sudeste asiatico. Me quedaban quince minuto, o sea que me sobraba tiempo, me mande con el carnet de periodista y pude entrar gratis; hice una visita express a los orientales. El museo del sudeste merece una segunda visita. Despues de los museos, me cruce con mi vieja, comimos un pan de chocolat y tomamos el subte hasta la plaza de la republique. Mientras duraba su reunion en un tipico cafe, donde despues aproveche para comerme una crock madame, recorri el barrio de la republique, mucho mas parisino que turistico, y aproveche para comprarme una decente mochila por 5 euros. Tambien camine por el boulevard de temple, apreciando todas sus casas fotografia y de motos hasta la bastille, aunque solo lo vi de noche. Despues volvimos a casa, comimos mas quesos y nos fuimos a dormir fusilados.