20, 21 y 22. Despidiendome de Paris


Al fin y al cabo, me fui a dormir temprano el sabado y podia levantarme temprano el domingo. Tenia que aprovechar que era el unico dia posible, de los que me quedaban, para ir a conocer Versailles. El magnifico palacio y sus jardines no queda dentro de la ciudad, ni pegado a ella, sino que se encuentra en las afueras a unos 30 kms, calculando a ojo. Para llegar alli tenia varias opciones: Tren, Bus o Taxi. Me decidi por la primera opcion que me parecio la mas sencilla.
El tren que va a Versailles, es un semi subte. Hay que pagar un ticket diferente, pero esta conectado a la red de subtes de Paris. Tambien dentro de la ciudad se desplaza de manera subterranea y tiene estaciones cada 10 o 15 cuadras. Recien cuando sale de la ciudad, sale a la superficie.
Para llegar hasta el tren y tomarmelo no tuve problema. Ademas no lo tuve que esperar mucho e iba bastante vacio. El miedo que tenia era el de saber si me estaba llevando a donde queria. Especule que si porque habia unos orientales adelante mio con un mapa, no creia que quisieran ir a otro lugar. Finalmente una hora y media despues que sali de Oberkampf llegue a mi destino.

Cuando el tren llego a la estacion, bajo una ola de turistas que no la habia percibido dentro de los vagones. La señalizacion, en todo el camino, para facilitar a los turistas llegar me parecio bastante mala. Por suerte el palacio quedaba a solamente dos cuadras de la estacion y siguiendo a la ola humana no hay problemas en llegar.
Ya a la distancia el palacio es impresionante, esta sobre una pequeña colina que da la impresion de aumentar su tamaño. Seria interesante pero mas costoso, ver el palacio sin todas las casas que tiene pegadas, para lograr discernir mejor tu forma.
El dia era lindisimo, no habia nubes y hacia relativamente calor, 6° grados. Evidentemente por eso habia una gran afluencia de gente en el palacio. Lo primero que vi cuando llegue fue la cola kilometrica para sacar la entrada. Me queria matar, iba a perder una hora para sacar la entrada. Por suerte habia visto que al bajar de la estacion habia un local que vendian las mismas entradas pero sin tanta gente. Volvi al local, hice una fila corta y compre mi entrada sin problema. Me ahorre bastante tiempo y pude entrar finalmente al palacio sin problema.
En el local donde compre la entrada me habian avisado que la audioguia estaba incluida con el precio de la entrada, pero no me sorprendio encontrar otra cola kilometrica para pedirla. Preferi dejarle la audioguia a los ponjas y manejarme con mi frances basico.
El palacio, como dije, es enorme, aunque el sector habilitado como museo es reducido, creo que menos de la mitad. Ademas el recorrido esta estipulado y es lineal, como para sugerirte de hacerlo rapido.
Por mi parte, en mi visita, le di mas bola a la arquitectura e intentar reconstruir como era vivir ahi que a ver cuadros; a esta altura estoy saturado de los cuadros, no puedo ver ni uno mas. Conoci los cuartos reales y las camas reales, con unos colchones que debian de tener como un metro de espesor. Tambien vi las bibliotecas particular e intente ver, por los lomos de los libros que quedaban, que leian, no me sorprendio lo que vi: Don quijote, Antiguo testamento, guia de flores, etc. El palacio es encantador, pero de a ratos me daba verguenza ajena tanto lujo. Con todo el recorrido del palacio no me duro mas de una hora y media.
Sin duda, lo mas lindo, quiza de todo lo que vi en Paris hasta ahora, fueron los jardines. No se si fue por efecto del dia lindisimo que habia, pero me encantaron. Son unos jardines enormes, llenos de arboles, con nieve y lagos con patos. Sin importar la gente que habia, irradiaban tranquilidad. Paseando por los jardines, se me desperto la idea de conocer mas la campiña. Los jardines son publicos, por lo que la entrada es gratuita y aparentemente la gente de Versailles lo utiliza como parque. Me resulto gracioso y extraño ver unos especies de boys scouts rubiecitos, con vestimentas pardas, jugando al rugby, me hicieron acordar mas a las juventudes hitlerianas que a los inocentes scouts de Argentina.
Intente quedarme lo maximo que pude entre los jardines y el palacio. Estirandolo habre estado hasta las tres de la tarde. Despues volvi a la estacion, pensando en bajarme en el centro para recorrer los bouquinistes, encontrar unas litografias sobre la muerte que habia visto y que me habian encantado.
No tuve en problemas en la vuelta, volvia tambien bastante vacio e iba rapido. Aproveche los dos viajes para adelantar el libro de Manuel Sacristan que estaba leyendo, Papeles de filosofia. Llegue a las cuatro al centro de Paris, tenia tiempo para recorrer tranquilo. Mi unico problema es que no tenia mucho euros, tenia dolares en la billetera para cambiar.
Recorri toda la costa del Sena, del lado del Museo Orsay hasta la altura de Notre Dame, donde termine encontrando las litografias que queria. Las compre y me volvi, muerto, a la casa de Alberto. Por la noche de mi dia 20, domingo, vinieron a comer Maria, una amiga de ella, y los chicos, Alex y Cass.

El lunes, dia 21, fue tranquilo. Me levante tarde, pasadas las 10 de la mañana. Solo tenia dos actividades para hacer. Encontrarme con una militante del PSOE-PARIS, Consuelo Jaroslawski, a eso de las dos de la tarde en la punta noreste de Paris y salir con Cass a tomar algo como despedida a eso de las 4 y media de la tarde. Hice tiempo, preparando el blog por ejemplo y almorzando algo, en lo de Alberto hasta la una que parti a encontrarme con Consuelo.
Los barrios que cruze hasta llegar a donde iba, no los habia recorrido nunca, son los mas humildes de Paris. A diferencia del centro, habia muchos edificios en pesimo estado, estilo casas tomadas. Tambien vi mas gente instalada, viviendo en la calle. Ademas, como en cualquier barrio humilde del mundo, locales de ropa a precios baratisimos. La avenida que mas camine estaba lleno de puestos de comida arabe. De hecho uno de lo que mas me llamo la atencion fue ver a una señora toda tapada, solo se le veian los ojos, al estilo taliban.
Mi encuentro con Consuelo fue de lo mas agradable. Ella es una española con una larga residencia en Paris y milita en el PSOE-PARIS hace mas de 30 años. Me conto los problemas actuales de los partidos socialistas español y frances externos e internos. Su vision del estado actual de la sociedad europea y los problemas de la inmigracion y seguridad por ejemplo. Aunque el encuentro no duro mas de 45 minutos fue de lo mas agradable, vuelvo a recalcar.
A mi vuelta, como tenia tiempo y tenia hambre, decidi para a comer en el restaurant mas barato, antro y arabe que vea. Entre en uno bastante precario, para Francia, pero que sin embargo tenia un televisor plasma y donde tambien habia una señora toda tapada. Comi una especie de fajita de carne de algo con cebolla, unas fritas y una lata de gaseosa por 5 euros. Un golazo, valio la experiencia. Despues llegue a lo de Alberto justo antes de que llegara Cass y Sara, una amiga de cine.
Llegaron, despues de tener clases en el Instituto de Cine, y nos pusimos a ver a donde podiamos ir a tomar algo un lunes a las 5 de la tarde, la decision fue encarar para la rue roquette en Bastille. El pub donde terminamos queda en una cortada que cruza la Roquette antes de llegar a Bastille, en esta cortada habia unos cuantos pubs todos muy sugerentes para entrar. En el que finalmente terminamos entrando era chiquito con una ambientacion australiana, bohemia y surfista.
Tomamos y hablamos mucho en el pub, la pasamos muy bien. La cerveza creo que era Kronenburg o no se, pero esta riquisima. Los temas de conversacion fueron muy variados: Desde problemas concretos hasta metafisica existencial y las preguntas propias de la edad.
Dejamos el pub a eso de las 8, las chicas cursaban al dia siguiente. Nos despedimos calurosamente hasta el proximo reencuentro y cada uno tomo su camino. Asi termino lo relevante de mi dia lunes, que como ven fue corto.
El martes era mi ultimo dia completo en Paris. Por suerte amanecio despejado, sin una sola nube, no hacia tanto frio, era el mejor dia que me habia tocado. Habia quedado en almorzar con Jonathan, secretario de comunicacion de los jovenes socialistas franceses, tenia libre la mañana y la tarde para recorrer como turista. Me levante lo mas temprano que pude para ir al cementerio de Montparnasse, que me venia esquivando hacia rato. Para ahorrar tiempo fui en metro.
Las ultimas imagenes que tenia de los cementerios eran en dias nublados, con frio, nieve y cuervos, mas oscura imposible. En cambio la imagen que tenia Montparnasse cuando llegue fue la opuesta, salvo por los cuervos. Pedi un mapa en la garita de seguridad y me arme un recorrido.
No camine tanto como en Pere-Lachaise, pero este cementerio tenia algo raro. Habia un monton de calles señalizadas en el mapa que despues no aparecian, tarde un monton en encontrar cada tumba. Entre las personas que pase a visitar estuvieron: Sartre y Simone de Beauvoir (mis respetos mas grandes por ambos), Marguerite Duras, Pierre Proudhon, Hachette (el de la editorial), Cioran y, obviamente, Julio Cortazar. Lamentablemente, a pesar de que estuve media hora buscando, no encontre la tumba de Guy de Mauppasant, quien escribio el Horla un cuento que me cambio. Otro dato que me llamo la atencion fue la devocion en la tumba de Emile Durkheim, un pionero de la sociologia del siglo XIX. No esperaba encontrarla en una figura como el.
Sali volando de Montparnasse para encontrarme con Jonathan en Sulferino, la sede del PS frances. Con el fuimos a almorzar a la vuelta. Pudimos conversar largo y tendido a pesar de los ajustados tiempo que tenia el por la campaña para las elecciones regionales de Marzo. Primero me conto de los tipos de trabajo de formacion politica que tienen con los militantes, en general comparado con Argentina, se enfoca mucho mas en gestion publica y debates de coyuntura. Tambien me dio un pantallazo de las diferentes corrientes internas y su peso en el partido. Ademas hablamos de los problemas de la comunicacion politica y las nuevas tecnologias, su especialidad. Fue muy amable en la conversacion y en su explicacion de la situacion francesa.
Despues de comer volvimos a Sulferino donde hicimos una recorrida por todo el edificio. En si el edificio son dos, y es un palacio del siglo XVIII. Tiene creo alrededor de 4 pisos cada uno y es enorme. Cada seccion, por ejemplo prensa, comunicacion politica, asesores, tiene un piso en alguno de los dos edificios. En cada piso de estos hay alrededor de 8 personas trabajando permanentemente. Las oficinas del PSF no tienen nada que envidiarle a una empresa, tiene computadoras ultimo modelo y unas cuantas fotocopiadoras a su disposicion. Por ejemplo entre otras cosas tienen dos salas de prensa, exclusivas para eso. En el momento en el que recorriamos los pisos, se encontraba la candidata Hidalgo para Paris, por comenzar el primer chat propio del PS con cibernautas electores. Todo el chat y la preparacion habia sido por cuenta del equipo de comunicacion de las oficinas de Sulferino. Alrededor de las tres y algo nos despedimos con Jonathan y los miembros de la JS. Fueron muy calidos y atentos e general conmigo.


Como me quedaba bastante tiempo de la tarde y el dia estaba precioso me mande para la torre Eiffel por ultima vez. Estaba bastante corto de plata pero quiza podia pagar para subir por la escalera. Cuando llegue no me sorprendio las filas enormes que habia para subir. Pero si me decepciono ver que el 3° piso estaba cerrado, preferi quedarme abajo.
Me llamo la atencion que mientras miraba la torre, escuche un silbato y vi a todos los negros vendedores ambulantes salir corriendo, al ratito aparecio la bicipolicia persiguiendolos. Fue una imagen bastante fea y sumo otro punto mas a la vision que tengo de la seguridad en Francia.
Al no tener nada mejor que hacer, me quede un rato en la plaza leyendo con los rayitos de sol que un poco me calentaban. Volvi caminando a eso de las seis y muy cansado. Antes llame de un telefono publico a Tales, mi nuevo amigo brasilero y socialista, para ir a tomar unas postergadas cervezas a la noche. Quedamos para las 8 devuelta en la Roquette.
Llegue a lo de Alberto, me bañie y volvi a salir. Me encontre sin problema con el, en la salida de metro de la Roquette. Me ofrecio ir a un bar que unos amigos iban a ver jugar a Lyon - Real Madrid, asi que fuimos para ahi. El bar quedaba del otro lado del Sena, no muy lejos. Con los amigos hablamos poco, solo hablaban frances aparentemente. Tomamos unas cuantas cervezas y me explico Tales las diferencias entre Francia y Latinoamerica, principalmente referido a la joda y las mujeres, pero tambien a otras cosas.
Asi paso la noche. Despues del partido, nos volvimos caminando cada uno para su casa con Tales. El se tenia que levantar temprano al dia siguiente para trabajar. Nos despedimos y quedamos para la proxima y en hablar por internet, un gusto conocerlo.

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